La tiroides es una glándula en forma de mariposa ubicada en el cuello, que produce hormonas esenciales para regular el metabolismo, es decir, la manera en que el cuerpo usa la energía. Las hormonas tiroideas afectan múltiples funciones corporales, incluyendo la frecuencia cardíaca, la temperatura corporal, el peso y la energía. Un desbalance en estas hormonas puede conducir a condiciones como hipotiroidismo o hipertiroidismo, afectando significativamente la salud general.

Los nódulos tiroideos pueden no presentar síntomas visibles, pero cuando lo hacen, pueden incluir un bulto palpable en el cuello, dificultad para tragar o respirar, y cambios en la voz. Dependiendo de si estos nódulos son funcionales o no, pueden producir exceso de hormonas tiroideas causando síntomas de hipertiroidismo, como pérdida de peso inexplicable, nerviosismo, y latidos cardíacos acelerados.

Cuando la tiroides está alta, generalmente se refiere a una condición llamada hipertiroidismo, donde la tiroides produce más hormonas de lo normal. Esto puede llevar a una serie de síntomas, incluyendo aumento del ritmo cardíaco, pérdida de peso, nerviosismo, temblores, fatiga, y sensibilidad al calor. Es importante tratar el hipertiroidismo adecuadamente, ya que puede tener complicaciones serias, incluyendo problemas cardíacos.